domingo, 24 de febrero de 2013

OLVIDAR



Olvidarte quiero,

olvidarte sin olvidarme,

es tarde y lo comprendemos,

no podemos aterrizar de las nubes

y tocar suelo recto,

es por eso, que todo lo que me pasa contigo,

me dice... que ya es tarde.

Ya es tarde para besarte,

pues mi alma desnudasteis,

así, sin más, sin pronunciarte.


Quieres y no puedes,

quieres atraerme y descontrolarme.

Perdida, en un precipicio donde pedir auxilio a gritos,

no bastaría, pues es tanta la soledad y el vacío,

que encuentro en este ancho,

que miro atrás sin recordar,

encontrando una piedra sin fragmentar.

¡Qué curioso y que ameno!,

trabajar sin complejos, sin dialectos,

trabajarnos en el más absoluto silencio.

¡Qué miedo me dan tus manos confrontadas a mi ocaso!

Nace un fuego junto a ellas y a mi mente llevan al fracaso,

todo por no comprender, por no saber,

qué es lo que le espera a la estrella tierna,

la miramos sin entenderla

y es que ella no es de la tierra.

¡Semilla esbelta, polvo de luz!,

¡cae sobre mi! dame tu bendición,

lléname de comprensión, sabiduría del mar profundo,

del atardecer transeunto.


Coloquialmente estoy sin estar,

coloquialmente me comprometo a mi despertar,

y no me miréis así ojos de la carne,

pues ando a la deriva sin angustiarme,

creedme ojos de la faz, que no escribo esto,

si antes no morís en vuestro mirar.


No soy de nadie, ni tengo un nombre,

nadie me rompe la libertad

y aquel duende en la noche,

que me quiere llevar a viajar,

es un segundo de mi maleza

que creció entre las flores sin avisar.

Por eso digo:

Arriba este teatro con caretas al interpretar!,

enseñadme vuestras calamidades,

que a mi alma iluminada, Irán a parar,

y aquí estoy,

para subiros hacia un nuevo paisaje verdadero y único,

sin papeles que adjudicar.


Basta ya de vivir en lo falso, de vivir en la irrealidad,

agarraros a este pecho con fuerza, así como niños cumpungidos al llorar,

y haceros monarcas gobernantes de la sinceridad.

Disfrutando de los lagos de cometas muertos,

de galantes de puertos

y de estrofas caldeadas en la luz de mi palabra,

que ya no soy peregrina pues alcance el cielo albino,

y esto es lo que te ofrezco después de tus desechos desechar.


Volad, flotad, nubes de creación viva explotad!,

aires de grandeza escondidos tras el rostro de la humildad.

Se acabo el soñar, porque el despertar ya es.

YO SOY. 


María Arévalo García.

1 comentario:

  1. Es maría arévalo garcia, pero ha quedado preciosa, gracias toni,,,,,,,,,,,

    ResponderEliminar